POR LO TANTO, ORARÁS ASÍ!

DEVOCIONAL DIARIO

"Por tanto, así oraréis: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Y perdónanos nuestras deudas como hemos perdonado a nuestros deudores. Y no caigamos en tentación, mas líbranos del mal, porque tuyo es el reino, el poder y la gloria por los siglos. Amén. 

Mateo 6: 9-13 

PENSAMIENTO: Esta oración que Jesús enseñó a sus discípulos es un ejemplo, un modelo de lo que deben ser nuestras oraciones. Comienza con la adoración y alabanza a Dios Padre, busca cumplir sus promesas para nuestra vida diaria y el perdón de nuestros pecados, buscando la fuerza y ​​la victoria del Señor. Para terminar, le da honor y gloria al Gobernador del Universo, el Redentor de la humanidad. La oración modelo comienza con la seguridad de que Dios es nuestro Padre, y esto nos motiva a glorificarlo. Jesús practicó la oración con regularidad y frecuencia, y también nos enseñó a orar. Su gran objetivo siempre ha sido traer a las personas de regreso a Dios a través de la redención y la adopción cuando eran niños. El Padrenuestro contiene siete peticiones de bendiciones espirituales y solo una petición de necesidades materiales. Siempre debemos recordar esto. La oración del Señor revela a Jesucristo. Ciertamente, en Él se centran todas las palabras de esta oración. ¿Cuáles son las primeras palabras? Padre nuestro, que estás en los cielos. Fue en la cruz donde se hicieron posibles estas palabras, y poco después de la resurrección Jesús dijo: "Subo a mi Padre, y a vuestro Padre, a mi Dios y vuestro Dios". Juan 20:17. El Salvador murió por nosotros. 

Oración: Señor, quiero ser como niños pequeños para poder alcanzar tus bendiciones. Haznos dignos de misericordia, porque te necesitamos y dependemos de ti. Quiero pedirte, Dios mío, que no nos falte: fe, esperanza, paciencia y confianza, porque queremos llegar al cielo de gloria que nos preparaste. Dios te pido por este día, paz y gracia para ganar las luchas. ¡Te doy gracias a Dios, porque tú eres mi Dios! ¡¡¡Eres digno de alabanza y honor por los siglos de los siglos !!! ¡¡¡Sé que no nos abandonarás !!! Creo en esta oración. Creo en ti. Quiero darte las gracias porque no merezco tanto amor. Pero tú me amaste primero y te agradezco este amor incomparable. ¡Te amo Jesús! ¡Que tu Espíritu Santo permanezca en mí! En nombre de Jesús. Amén.