DIOS NO TE HA DADO EL CONTROL DE TODO!

23/02/2022

DEVOCIONAL DIARIO 

Cuando los días sean buenos, aprovéchalos al máximo; pero cuando son malos, considerad: Dios hizo lo uno así como lo otro, para que el hombre no supiera nada acerca de su futuro. 

Eclesiastés 7:14

 

- Es normal que intentemos controlar nuestra vida... Hacemos planes, elegimos una carrera, una profesión, con quién nos relacionamos, qué compramos, qué cónyuge... Elegimos defender causas, participar en una comunidad, seguir indicaciones, abandonar a los demás, procurando llevar bien nuestra vida. ¿Derecha? Todo parece ir bien cuando somos nosotros los que llevamos las riendas y las cosas suceden como queremos... Pero sabemos que no siempre es así. ¡Dios no nos ha dado el control completo sobre la vida! Muchos solo se dan cuenta de esto, cuando "en un abrir y cerrar de ojos" todo cambia a su alrededor... 

-Decepcionante? No. Para el cristiano que depende de Dios no debe ser, sino un descanso. ¡Saber que dependemos totalmente de Dios con cada paso que damos debería traer paz al corazón! ¡Él nos bendice en el Camino y hace realidad los sueños! Sin embargo, entiendan que no somos nuestros, sino de Dios, quien controla todas las cosas. Podemos hacer planes para una larga vejez, pero solo Dios sabe hasta dónde vamos a llegar... Todo el futuro está bajo Su control y sabemos que Él nos ama. Al final, la vida se trata de caminar por la fe... ¡Entrega a Jesús tus sueños, sabiendo que Él cumplirá lo que es mejor para ti!


Dale el control a Dios!

- En las buenas y en las malas, ¡Dios es Dios! ¡Confía en Él con todo tu corazón!

- Ora con Jesús como tu modelo. Pide las cosas al Padre, pero di siempre: "Hágase tu voluntad, y no la mía", como oró Cristo.

- Entrega todo a Dios. Solo te cansarás más si intentas llevarlo todo tú solo. ¡Ve a Jesús, Él te da alivio!

- ¡Descansa en Dios! No sabemos cómo será el futuro, ¡pero seguimos a Jesús que tiene el mañana en sus manos!

- Ten la Biblia como tu sustento diario. La Palabra de Dios te guiará para tomar las decisiones correctas, no des por sentada la vida en esta tierra. ¡Dios es nuestra única certeza y fuerza!


A orar: Papá, la vida a veces nos sorprende, con cosas buenas, alegrías, pero también con dolor y sufrimiento. Ayúdame a confiar en Ti, tanto en las buenas como en las malas. Enséñame a creer ya esperar en la Vida plena que me has preparado. Te doy mi futuro y todos mis planes, porque te pertenezco ¡Después de todo, todo es tuyo! Tú eres mi Señor, cuida mi vida y la de mi familia. En el nombre de Jesús, te pido y gracias... Amén!